sábado, 4 de junio de 2011

¿Se debe permitir la prostitución?


En los debates actuales sobre moral sexual, quienes se refieren al derecho al la autonomía sostienen que los individuos deben ser libres de escoger por sí mismos el uso que hagan de sus cuerpos. Por tanto, no habría nada de malo, por ejemplo en el ejercicio libre de la prostitución.

EN cambio, a Kant la prostitución los parecía rechazable, curiosamente, por las mismas razones. “ Permitir que una persona saque un beneficio económico de que la use otro para satisfacer el deseo sexual, hacer de sí misma un objeto de demanda, es […] hacer de sí misma una cosa con la que otro satisface su apetito, tal y como calma su hambre con un filete” Los seres humanos no “tienen derecho a ofrecerse a sí mismos, por un beneficio económico, como cosas para que otros lo usen a fin de satisfacer sus propensiones sexuales” Hacerlo así es tratar a la propia persona como una mera cosa, un objeto de uso. “ El principio moral que subyace en esto es que el hombre no es propiedad de sí mismo y no puede hacer con su cuerpo lo que le de la gana”

¿Podemos hacer con nuestro cuerpo lo que nos de la gana?

viernes, 3 de junio de 2011

¿Qué valor tiene una promesa?


William y Elizabeth Stern querían tener un hijo, pero por sí mismo no podían. Ella padecía de esclerosis múltiple. Publicaron un anuncio en busca de una “madre sustituta” dispuesta a quedarse embarazada a cambio de una suma considerable.

Una de las mujeres que respondió al anuncio fue Mary Beth Whitehead, que tenía dos hijos y era esposa de un trabajador de la recogida de basuras. En 1985, William Stern y Mary Beth Whitehead firmaron un contrato. Mary Beth aceptaba que se la inseminase artificialmente con el esperma de William y entregar el niño una vez hubiese nacido. Aceptaba además ceder sus derechos maternos para que Elizabeth pudiese adoptar el niño. Por su parte, William pagaría a Mary Beth 10.000 dólares además de correr con los gastos médicos (unos 7.500 dólares).

En 1986 Mary Beth dio a luz a una niña, sin embargo, fue incapaz de separase de ella y quiso quedársela. Huyo a Florida, pero los Stern consiguieron que se emitiese una orden judicial que la obligaba a entregar a la niña y al final, la disputa por la custodia acabó en los juzgados de New Jersey.

El juez tuvo que decidir si el contrato debía cumplirse, y declaró que el acuerdo era válido basándose en que los contratos son sagrados. Un trato era un trato, y la madre biológica no tenía derecho a romper el contrato simplemente porque hubiese cambiado de opinión.

Las objeciones que se presentaron fueron dos. La primera fue que el consentimiento inicial de Mery Beth estuvo condicionado por la necesidad de dinero, y para que un trato tenga validez debe hacerse libremente. La segunda fue que esta manera de proceder convierte a los niños en mercancías y explota a las mujeres al tratar el embarazo como un negocio lucrativo.

Desde un punto de vista moral, ¿se debe cumplir lo pactado? ¿Por qué?

martes, 31 de mayo de 2011

¿hay bienes que el dinero no pueda o no deba comprar?


Gran parte de los debates más acalorados acerca de la justicia tienen que ver con el papel de los mercados: el libre mercado ¿es justo? ¿Hay bienes que el dinero no pueda o no deba comprar? Si los hay, ¿cuáles son, y por qué está mal comprarlos y venderlos?

Como siempre el análisis de un caso puede ayudarnos a aclarar estas cuestiones. Durante la Guerra Civil Norteamericana, el servicio miliar era obligatorio, pero la Unión permitió que se pudiese pagar a otro para que fuese en su lugar. Los reclutas que buscaban sustitutos publicaban anuncios en los periódicos; pagaban hasta 1.500 dólares, una suma considerable en aquella época. Al mismo tiempo el congreso aprobó una nueva ley de reclutamiento que establecía que los reclutas podían abonar al Estado 300 dólares (la paga de un año de un trabajador) en vez de ingresar a filas Este hecho dio lugar a la frase “la guerra de los ricos en la que pelean los pobres”.

Un caso parecido vivimos en España durante la Guerra del Rif, donde aquellos que podían pagar la enorme suma de 6.000 reales quedaban exentos de ir al frente.

¿es justo que alguien pague a otro para que vaya a la guerra por él?

jueves, 19 de mayo de 2011

¿qué es más importante el respeto a la ley o el uso del derecho fundamental de reunión y manifestación?


La Junta Electoral Central ha acordado prohibir por un solo voto las manifestaciones convocadas para el sábado, jornada de reflexión en toda España. "En los días de reflexión y votación nuestra legislación electoral prohíbe realizar acto alguno de propaganda o de campaña electoral. Así mismo el día de la votación prohíbe formar grupos susceptibles de entorpecer, de cualquier manera que sea, el acceso de los locales electorales, así como la presencia en sus proximidades de quienes puedan dificultar o coaccionar el libre ejercicio del derecho del voto”, asegura la resolución.
En cambio, El Tribunal Constitucional avala la celebración de manifestaciones durante la jornada de reflexión siempre y cuando su capacidad de influir en el electorado sea "remota". La "mera posiblidad" de vulnerar el derecho de participación política no puede anular el derecho de reunión y manifestación

Las manifestaciones de indignación resisten en la Puerta del Sol, pese a la prohibición y a la lluvia.
¿Deben los manifestantes acatar la sentencia de la Junta Electoral Central?

jueves, 5 de mayo de 2011

¿Es justo aseisinar a un asesino?


El 2 de Mayo de 2010, el presidente de EEUU, Barak Obama, dirigió las siguientes palabras al mundo entero:
Buenas noches. Esta noche puedo anunciar al pueblo estadounidense y al mundo que Estados Unidos ha dirigido una operación que ha causado la muerte de Osama bin Laden, el líder de Al Qaeda, y el terrorista responsable del asesinato de miles de hombres inocentes, mujeres y niños...

...Hoy, bajo mi dirección, Estados Unidos ha lanzado una operación contra el complejo en Abbottabad, Pakistán. Un pequeño grupo de estadounidenses llevó a cabo la operación con extraordinaria valentía y capacidad. Ningún estadounidense resultó herido. Procuraron evitar víctimas civiles. Tras un tiroteo, mataron a Osama bin Laden y se hicieron cargo de su cadáver...

...El pueblo estadounidense no eligió esta lucha. Llegó a nuestras costas, y comenzó con la masacre sin sentido de nuestros ciudadanos. Después de casi 10 años de servicios, lucha y sacrificio, conocemos bien los costos de la guerra. Estos esfuerzos pesan sobre mí cada vez que, como Comandante en Jefe, tengo que firmar una carta para una familia que ha perdido a un ser querido, o mirar a los ojos de un miembro del servicio que ha sido gravemente herido.

Los estadounidenses entienden los costos de la guerra, aunque como país nunca toleraremos que nuestra seguridad se vea amenazada ni nos quedaremos de brazos cruzados cuando se mate a nuestra gente. Seremos implacables en la defensa de nuestros ciudadanos y de nuestros amigos y aliados. Seremos fieles a los valores que nos hacen quienes somos. Y en noches como ésta, podemos decirles a aquéllos que han perdido a seres queridos por el terrorismo de Al Qaeda: se ha hecho justicia.


¿Es cierto que se hizo Justicia? ¿qué razones pueden existir para argumentar que la acción del ejercito estadounidense fue correcta? ¿Cuál es la ley que determina la correción/incorrección de esa acción?

miércoles, 20 de abril de 2011

¿Somos dueños de nosotros mismo?


El liberalismo siempre ha defendido como principio supremo que cada individuo es dueño y soberano de sí mismo. Y como escribe el filósofo liberal Nozick “ tener derecho de propiedad de X es tener el derecho de determinar qué se haga con X”.

Obviamente, el liberalismo tiene en nuestros días toda una corriente de detractores y su principio supremo suele ser puesto a prueba. Analicemos un caso complejo que nos sirva para evaluar si es justo ese principio:

CANIBALISMO PACTADO

En 2001 tuvo lugar una extraña cita en un pueblo alemán. Brandes, ingeniero informático de 43 años de edad, respondió a una anuncio de Internet que buscaba a alguien dispuesto a que lo matasen y comiesen. Había puesto el anuncio Armin Meiwes, de 42, técnico de ordenadores. Meiwes no ofrecía ninguna compensación económica; sólo la experiencia en sí. Brandes, tras reunirse con Meiwes y sopesar la propuesta mientras tomaban café, dio su consentimiento. Meiwes mató al invitado, troceó el cadáver y lo guardó en bolsas de plástico dentro de su nevera. Para cuando lo arrestaron se había comido case 20 kilos de su víctima.

Cuando Meiwe fue llevado a juicio, un caso tan llamativo fascinó al público y confundió al tribunal. Alemania no tiene leyes contra el canibalismo. El perpetrador no podía ser condenado por asesinato, arguyó la defensa, ya que la víctima participó voluntariamente en su propia muerte. Su cliente no podía ser culpable de haber matado a alguien que pidió que lo matasen. En el fondo, lo que Meiwes había cometido era un “suicidio asistido” que se castiga como mucho con 5 años de cárcel.

¿podemos hacer con nuestras vidas y nuestro cuerpo lo que nos de la gana? ¿Somos dueños de nosotros mismos?

viernes, 8 de abril de 2011

¿Es justo que el Estado me quite parte de mi salario?


El filósofo norteamericano Robert Nozick criticó duramente que el Estado tenga legitimidad para tomar una parte del salario de los ciudadanos, llegó a afirmar que “gravar las rentas del trabajo es equiparable a los trabajos forzados”... Su argumento es que si el Estado tiene derecho a reclamar una parte de lo que gano, también tendrá derecho a reclamar parte de mi tiempo. En vez de tomar el 30 por ciento de mis ingresos, podría obligarme a dedicar el 30 por ciento de mi tiempo para el Estado. Pero si el Estado puede forzarme a trabajar para él, está afirmando, en esencia que tiene un derecho de propiedad sobre mí, cosa que es inaceptable.

En palabras del propio Nozick “Requisar el fruto del trabajo de alguien es euivalente a requisarle horas y obligarle a realizar actividades diversas. Si otros le fuerzan a usted a hacer cierto trabajo, o un trabajo no remunerado, durante cierto periodo de tiempo, serán ellos, aparte de las decisiones que usted pudiera tomar, quienes decidirán qué deberá hacer usted y cuál será el propósito de trabajo que usted haga. Esto […] los convierte, parcialmente, en sus amos; les da un derecho de propiedad sobre usted”

Nozick ha sido duramente criticado por aquellos que defienden el modelo del Estado del Bienestar. Se ha arguido, entre otras cosas, que su liberalismo esconde un profundo egoismo social propio de aquel que se encuentra en una posición privilegiada.

¿Tiene razón Nozik?